Cilleros el Hondo es una localidad que depende administrativamente de Mozárbez y que, en la actualidad, cuenta con tan sólo seis habitantes. Pueblo formado por las familias que trabajaban en las grandes fincas ganaderas que lo circundan, la mecanización del campo empujó a sus habitantes a la emigración a otros lugares. Esto ha provocado el abandono de la mayoría de las casas del pueblo, ganadas por la vegetación y vencidas por el paso del tiempo. Dos cigüeñas habitan el campanario de una iglesia que ha visto hundirse su techumbre. El silencio que encontramos en sus calles contrasta con el ajetreo que debió vivir hace unas décadas y nos invitan a reflexionar si hemos acertado fiando nuestro futuro al desarrollo urbanístico y a la economía de mercado.
Cilleros se halla rodeado de extensas dehesas dedicadas a la cría extensiva del ganado. El paseo que realizamos atraviesa varias de estas fincas que durante muchos tiempos fueron el sostén de numerosos familias. La dehesa es un paisaje humanizado, ejemplo de convivencia del hombre con el medio ambiente, modelo de una gestión sostenible en la que se utilizan los recursos que ofrece la naturaleza a la vez que se trabaja por su conservación. Los sistemas adehesados son representativos del clima mediterráneo, localizándose principalmente en Andalucía, Extremadura, Castilla y León y Castilla La Mancha. En Salamanca, tenemos la fortuna de contar con algunas de las dehesas mejor conservadas de la península ibérica.
La conservación de las dehesas está hoy día gravemente amenazada por una serie de causas que pueden alterar de modo irreversible el equilibrio de sus recursos y el sistema de explotación, como son entre otras la falta de regeneración del arbolado, la seca de la encina y el alcornoque y el despoblamiento rural.
La ruta nos permite disfrutar de este paisaje tan salmantino con el aliciente de los numerosos arroyos y charcas que rebosan de agua merced a la lluvia caída estas semanas.
Para realizar el paseo, cuando lleguemos a Cilleros debemos encaminarnos hacia la Iglesia y seguir la calle que tiene una capa de hormigón hasta dar con el inicio de una pista de tierra que se aleja hacia las dehesas. Enseguida atravesaremos el arroyo del Zurguén y nos internaremos entre las encinas donde pasta el ganado. El camino no tiene pérdida ya que se ha de seguir siempre la pista y no tomar ninguno de los caminos que se cruzan.
El desvío que nos lleva a Mozárbez es fácil de identificar: surge a la izquierda del camino, cuando a ese lado de la pista se termina la dehesa y comienzan los campos de cultivo dedicados al cereal. A la derecha continúan las encinas. El desvío nos conduce a Mozárbez que es visible desde ese momento. También disfrutaremos de una amplia panorámica de Salamanca y de su alfoz.
COMO LLEGAR:
Cilleros el Hondo está a unos 20 kilómetros de Salamanca. Tomamos la carretera de Vecinos y después de pasar Aldeatejada deberemos desviarnos en dirección a Las Veguillas. Avanzados unos kilómetros seguiremos el cruce que nos indica Morille y por esta carretera sale la desviación a Cilleros que encontramos a los pocos metros. Atención a la indicación de salida a Cilleros ya que es un cartel muy pequeño.
DATOS PRÁCTICOS:
La ruta en ida y vuelta nos puede llevar unas tres horas. El camino se encuentra en buenas condiciones pero en todo caso debemos llevar calzado deportivo adecuado para caminar en una pista de tierra. La ruta transcurre entre fincas dedicadas a la ganadería por lo que podemos encontrarnos con vacas sueltas por la pista. De ser así, debemos continuar caminando hasta que los animales se aparten. En ningún caso, debemos provocar al ganado.
COMO LLEGAR:
Cilleros el Hondo está a unos 20 kilómetros de Salamanca. Tomamos la carretera de Vecinos y después de pasar Aldeatejada deberemos desviarnos en dirección a Las Veguillas. Avanzados unos kilómetros seguiremos el cruce que nos indica Morille y por esta carretera sale la desviación a Cilleros que encontramos a los pocos metros. Atención a la indicación de salida a Cilleros ya que es un cartel muy pequeño.
DATOS PRÁCTICOS:
La ruta en ida y vuelta nos puede llevar unas tres horas. El camino se encuentra en buenas condiciones pero en todo caso debemos llevar calzado deportivo adecuado para caminar en una pista de tierra. La ruta transcurre entre fincas dedicadas a la ganadería por lo que podemos encontrarnos con vacas sueltas por la pista. De ser así, debemos continuar caminando hasta que los animales se aparten. En ningún caso, debemos provocar al ganado.
